Hotel Tamariu

El Hotel Tamariu es un pequeño hotel familiar, de 17 habitaciones, situado frente al mar en la bonita cala de Tamariu, de donde le viene el nombre. Tamariu es uno de los tres núcleos marítimos del municipio de Palafrugell. El hotel cuenta con una historia familiar de más de 80 años. La cuarta generación encarnada por los tres hermanos Pellicer-Trilla (Susan, Lluís y Anna), es la que actualmente gestiona el hotel. Sus bisabuelos, él pescador, y su mujer cocinera, fueron los fundadores del negocio. Comenzaron por una pequeña taberna dónde servir unas copas y unas comidas a los lugareños, y fueron evolucionando hacia restaurante primero y hacia hotel poco a poco, al empezar a construir algunas habitaciones para los visitantes de Barcelona que en ese momento descubrían la Costa Brava. El restaurante del hotel tiene una muy buena reputación en la zona por su cocina marinera y regional; los huéspedes del hotel pueden escoger entre comer a la carta o probar el menú del día, bien sea con la media pensión o con la pensión completa. Son famosos sus arroces y todo tipo de pescados, aunque no quedan atrás en carnes y guisos varios. La terraza sobre el paseo del mar es un lugar ideal para tomar unas bebidas, comer unas tapas o hacer una comida bajo el sol o una fantástica cena romántica mirando a la bahía o a las estrellas. Con la playa a diez metros de la entrada del hotel, los caminos de ronda para ir a pasear cerca del mar, una gran oferta complementaria a muy poca distancia, y un entorno fantástico, este pequeño y cálido hotel es un lugar ideal para relajarse y pasar unas muy buenas vacaciones.

Tamariu está situado en una zona privilegiada, entre el mar y la montaña. Los amantes del sol y la playa estarán encantados con nuestra costa, pero también es un sitio ideal para los que busquen buena gastronomía, cultura, deporte y entorno espectacular. Estamos cerca prácticamente de todas partes. Para los amantes de la naturaleza, contamos con los caminos de ronda, situados al lado de la costa con vistas impresionantes; también pueden visitar el Jardín botánico de Cap Roig, en Calella de Palafrugell, o subirse al faro para ver la bonita vista de Calella y Llafranc hacia el sur y del basto mar mediterráneo hacia el este. Innumerables playas y playitas del litoral, salidas en barco para admirar la costa o buscar rincones más escondidos dónde perderse, centros de buceo para ir a ver un fondo muy rico que puede compararse con los mejores del mundo, caminos para descubrir el interior del país... todo un universo de bolsillo por descubrir. Los que buscan cultura, en Palafrugell pueden visitar el Museo del Corcho, la Fundación Josep Plà (famoso escritor catalán e internacional), o la Fundación Vila-Casas con exposiciones que se renuevan constantemente. A menos de quince minutos en coche se puede visitar la población medieval de Pals o las de Peratallada, Palau-Sator y otras menos conocidas pero también muy interesantes; un poquito más lejos y de camino a Girona pueden visitar el castillo de Gala (la mujer del genial pintor Salvador Dalí) en la población de Púbol, y ya en Girona no se puede dejar de visitar todo el barrio antiguo de la capital, con sus callejuelas y centros de interés. En Palamós, a unos diez minutos, se puede visitar el Museo de la Pesca o asistir a la llegada de la ?vacas? (las barcas de pesca típicas de la zona), con la pesca de la tarde. En Sant Feliu de Guíxols, a una media hora, se puede visitar el Museu de la Joguina (juguete) o en Torroella, a más o menos la misma distancia pero en sentido norte, el Museo de la mediterránea... Si lo que se busca es ocio, tenemos hípicas a tan solo cinco minutos del hotel o Karts, también se puede pescar, ir en bici? o visitar parques de atracciones, para los más pequeños, situado en el mismo pueblo de Palafrugell.Si lo que se busca es ir de compras o salir de noche, el pueblo ideal es Platja d'Aro, a tan solo a unos 25 kilómetros. Es en esta población, donde los amantes del ocio, sobretodo de noche, pueden encontrar bares, discotecas, y otros sitios de interés. Con menos ambiente pero también interesante encontramos el pueblo más cercano, Palamós, a tan solo unos 15 kilómetros.